A veces, cuando me siento más perdido, imagino que puedo hablar directamente con la vida.
Como si fuera una presencia sabia y amorosa que siempre está ahí, esperando a que le haga las preguntas correctas.
Esta es una de esas conversaciones...
Yo
Vida, me siento atrapado. Todos los días me levanto, trabajo, como, y duermo.
A veces me detengo por un momento, me observo y siento que sigo igual que hace años.
¿Por qué siento que no avanzo?
La Vida
Querido hijo, el crecimiento no siempre es visible desde adentro. Eres como un árbol
que no puede ver sus propias raíces extendiéndose bajo tierra. Has aprendido a distinguir
el amor del placer, has desarrollado la capacidad de programar, has ganado sabiduría sobre
el valor del tiempo. Eso no es quedarse igual, eso es evolución silenciosa.
Yo
Pero trabajo puliendo autos desde hace 15 años. Mi cuerpo se mueve en automático
mientras mi mente se pierde. Me siento como un robot hecho solo para trabajar, comer y dormir.
La Vida
El trabajo que haces con las manos libera tu mente para vagar, para soñar, para procesar.
No todos tienen ese regalo. Mientras tus manos pulen metal, tu alma está puliendo ideas,
emociones, comprensiones. El automatismo del cuerpo puede ser la libertad del espíritu.
Y mira: en las noches programas, creas, construyes mundos digitales. Eso no es robótico,
eso es arte.
Yo
He comenzado muchos proyectos y nunca termino nada. Empiezo con pasión pero siempre
me detengo en el camino. ¿Por qué no puedo completar lo que empiezo?
La Vida
Porque tu alma es exploradora, no conquistadora. Cada proyecto que empiezas te enseña algo,
te transforma un poco, y cuando has extraído la lección, tu espíritu busca la siguiente aventura.
No todos los caminos están hechos para ser completados; algunos están hechos para ser caminados.
El valor no está siempre en el destino, sino en el viaje.
Yo
Antes me gustaban las fiestas, las discotecas. Ahora voy y me siento fuera de lugar.
Veo personas embriagadas, vacías. ¿Estoy volviéndome antisocial?
La Vida
No te estás volviendo antisocial, te estás volviendo selectivo. Tu alma ha madurado y
ya no encuentra nutrición en lo superficial. Es como cuando un niño deja de jugar con
juguetes porque ha descubierto los libros. No es pérdida, es evolución. Ahora buscas
conexiones reales, conversaciones que alimenten, presencias que sumen. Eso es sabiduría.
Yo
Valoro muchísimo cuando alguien me dedica tiempo. Un amigo, un familiar.
En esos momentos todo cambia, me siento vivo. ¿Por qué esos momentos son tan poderosos?
La Vida
Porque en esos momentos experimentas lo que realmente eres: un ser de conexión.
Los humanos no están hechos para la soledad absoluta, están hechos para el amor compartido.
Cuando alguien te regala su tiempo, te está regalando un pedazo de su existencia.
Y tú lo reconoces como el tesoro que es. Esa capacidad de valorar la presencia humana
es una de tus mayores fortalezas.
Yo
Quiero cosas simples: caminar por la mañana, escuchar pájaros, ver salir el sol.
Quiero cuidar mi cuerpo, rodearme de buenas personas, encontrar una buena mujer,
ser padre, ser amado incondicionalmente. ¿Son sueños demasiado simples?
La Vida
¡Qué hermoso que sepas lo que realmente importa! Mientras otros persiguen fantasías
complicadas, tú has identificado los ingredientes de una vida plena: naturaleza, salud,
amor, propósito, familia. No son sueños simples, son sueños sabios. Y están más cerca
de lo que crees. Cada amanecer es una invitación a caminar. Cada día es una oportunidad
de cuidarte. Cada encuentro humano es una posibilidad de conexión real.
Yo
A veces digo "un día menos" cuando otros dicen "un día más de vida".
¿Qué dice eso sobre cómo estoy viendo mi existencia?
La Vida
Dice que eres consciente de la finitud, y eso no es malo, es profundo. Pero también
revela que estás contando hacia atrás en lugar de hacia adelante. "Un día más" ve
cada amanecer como regalo; "un día menos" ve cada atardecer como pérdida.
Ambas perspectivas son verdaderas, pero una te impulsa y otra te agota.
¿Qué pasaría si empezaras a contar las experiencias en lugar de los días?
Yo
No sé cómo cambiar todo esto. Me siento detenido en mi propia existencia.
¿Cómo empiezo a despertar de este bucle?
La Vida
No necesitas cambiar todo, solo necesitas cambiar una cosa. Una caminata. Una conversación
honesta. Un proyecto pequeño que sí termines. Un momento de cuidado personal. Un "sí"
a algo que te emocione. Un "no" a algo que te agote. El despertar no es un evento,
es una práctica diaria de pequeñas elecciones conscientes.
Y recuerda: ya has empezado. Escribir estas palabras, hacer estas preguntas,
buscar estas respuestas... eso ya es despertar. Ya no estás dormido,
solo estás aprendiendo a caminar despierto.
Yo
Gracias, Vida. A veces necesito recordar que no estoy solo en esto.
La Vida
Nunca estás solo, querido. Yo estoy en cada respiración, en cada latido,
en cada momento de belleza que reconoces. Y hay millones de almas como la tuya,
buscando despertar, buscando sentido, buscando amor. Cuando compartes tu verdad,
les das permiso para compartir la suya. Cuando te permites ser vulnerable,
creas espacios seguros para otros.
Sigue escribiendo. Sigue buscando. Sigue siendo real. El mundo necesita tu autenticidad.
Reflexión final
Esta conversación nació de una noche en que me sentía particularmente perdido.
Imaginar que la vida misma me respondía con amor y sabiduría me ayudó a ver mi situación
desde una perspectiva más compasiva.
Tal vez tú también necesites escuchar que no estás solo, que tus luchas tienen sentido,
que tu búsqueda de autenticidad es valiosa. La vida es buena, incluso cuando duele.
Y siempre, siempre está tratando de darnos lo mejor, aunque no siempre lo entendamos en el momento.